Descubre Masca, la joya escondida de Tenerife

Por | 29 June, 2023 | 0 comentarios

Pueblo de Masca

La isla de Tenerife destaca por sus La isla de Tenerife destaca por sus vertiginosos valles e imponentes montañas pero, sobre todo, por conectar el mar y la cumbre en tan solo media hora.

Uno de sus rincones más icónicos, justamente, se esconde en el regazo de las frondosas laderas del Parque Rural de Teno. Masca es la joya de la corona, un territorio incomparable donde la naturaleza impera por encima de cualquier otro elemento humano.

Uno de sus rincones más icónicos, justamente, se esconde en el regazo de las frondosas laderas del Parque Rural de Teno. Masca es la joya de la corona, un territorio incomparable donde la naturaleza impera por encima de cualquier otro elemento humano.

El pequeño pueblo, considerado uno de los más bonitos de Tenerife, se erige como una atalaya desde donde se puede apreciar la inmensidad de los barrancos y el horizonte atlántico. ¿Nos acompañas a dar una vuelta por este lugar de ensueño?

Mirador de Masca: un paraje privilegiado

Mirador de Masca

Masca es perfecta para aquellos que deseen descubrir el lado más rural y salvaje de Tenerife.

Sus construcciones tradicionales abrazan las laderas de las imponentes montañas del Macizo de Teno y unidas a la hospitalidad de los vecinos, garantizan una experiencia satisfactoria para los más aventureros.

Desde el Mirador de Masca podrás deleitarte con unas vistas panorámicas que no te dejarán indiferente, ya que se puede apreciar la singularidad del paisaje y además en días despejados proporciona una increíble vista de la isla de La Palma.

Ya en Masca, la belleza estética de la arquitectura del pueblo aporta una visión profunda y enriquecedora de la historia del caserío, así como la innegable influencia de los guanches. Las casas construidas con arena volcánica, piedra o barro perviven como un reflejo fiel de la arquitectura canaria a pesar de la conquista castellana.

Una combinación de naturaleza e historia

Casa Tradicional Canaria Masca

Al llegar a la Plaza de Masca, el elemento más característico de la zona es el laurel de Indias, que proporciona sombra y protección a la Ermita de la Inmaculada Concepción. Se trata de una infraestructura cuyos pilares se colocaron en el siglo XVIII. De hecho, su fachada es el fiel reflejo de la arquitectura canaria de antaño; las piedras volcánicas y las maderas de tea atraen a los más curiosos al interior de una construcción bicentenaria.

Pero no es el único ejemplo de la mímesis del pueblo con la naturaleza, que también encontramos en el Museo Etnográfico de Masca, emplazado en la antigua escuela de los guanches. Las exposiciones que escenifican el estilo de vida y la rutina de los habitantes del lugar representan uno de los principales motivos por los que acceder al recinto. A su vez, el archivo fotográfico o los paneles explicativos aportan los matices necesarios para entender y conocer el día a día de la población autóctona.

El pasado guanche

Playa de Masca

¿Sabías que el camino de 5 kilómetros que separa Masca de su playa surgió del trabajo de los antiguos pobladores de la isla? Con sus propias manos, los guanches forjaron un sendero que, hoy en día, es una de las rutas favoritas de los más intrépidos.

Su intención fue aprovechar los terrenos más cercanos a la costa para cultivar en zonas menos escarpadas y gozar de los innumerables beneficios que aportaba el mar.

Hoy en día, el sendero atrae a aquellos que quieren explorar las entrañas del pueblo y su playa. Pero, ¡cuidado!, reserva con antelación la visita a este paraje de ensueño, ya que el acceso está limitado a varias rutas diarias debido a la afluencia de visitantes.

Escondite de corsarios y piratas

Barco Masca

Masca, en su momento, fue un refugio para los piratas y corsarios que asaltaban los barcos cargados de mercancías. Aprovechaban este recóndito y apartado lugar para reparar sus embarcaciones y descansar entre ataques.

Según cuenta la leyenda, incluso podría haber sido el lugar utilizado para esconder los ricos tesoros que robaban de los navíos procedentes de América.

Hoy en día, sin bucaneros, Masca sigue siendo un escondite para los visitantes que desean evadirse de las grandes urbes y sumergirse en el paraíso natural de Tenerife.

Una aventura de diferentes alturas

Palmeras Pueblo de Masca

En coche, en bicicleta, en transporte público… Múltiples alternativas y un único placer: Otear esta joya escondida entre montañas.

El acceso al pueblo en vehículo se antoja más sencillo y llevadero, ya que permite detenerse en los miradores y lugares pictóricos de las inmediaciones del lugar.

El aparcamiento, sin embargo, está limitado a dos horas, por lo que suele ser más conveniente acudir en transporte público para emprender el camino con total tranquilidad.

Los amantes de la adrenalina, en cambio, también tienen su ruta predefinida para pedalear en bicicleta desde la Degollada de Cherfe, a 1.057 metros de altura, donde se puede observar la singularidad de Masca y sus alrededores. En el supuesto de iniciar el rumbo desde Buenavista, te enfrentarás a pendientes de entre el 13 y el 20% para poner la guinda a una de las rutas ciclistas más vertiginosas de Tenerife.

La senda al paraíso del norte de Tenerife

 Masca en Primavera

Las curvas y la lejanía respecto a la capital tinerfeña no son un impedimento para aquellos que desean recorrer la isla de punta a punta. El trayecto de más de cien kilómetros promete una vivencia apasionante, cuya meta es un enclave rural encorsetado entre las verdes montañas y el océano Atlántico.

Si partes desde Santa Cruz de Tenerife, puedes optar por la autopista del norte o la del sur. La primera presenta un recorrido más corto y lento, idóneo si deseas apreciar la inmensidad del paisaje de la cara norte de la Isla.

En cambio, la segunda opción es más rápida, ya que es suficiente con transitar por la TF-1 hasta el municipio de Santiago del Teide. A partir de este punto, te espera un descenso por la carretera TF-436 hasta llegar a la entrada de Masca. De esta forma, la duración de la aventura en coche hasta llegar al pueblo es de una hora y media, aunque puedes hacerla más llevadera al detenerte en los apartaderos y miradores de la zona.

¿Te van las aventuras? ¡Esta es la mejor!

Categorías: Canarias, inspirate, Tenerife

Deja un comentario

Su dirección de e-mail no será publicada. Los campos obligatorios se indican con*

*